¿Ajusticiar?

Tanta gente dispuesta a sacrificarse por el mundo: la horca, el pelotón de fusilamiento, la silla eléctrica, el gas letal o la inyección, la cadena perpetua, los paramilitares, los disparos legales. Jueces, policías, militares, científicos, periodistas y civiles opinadores, dispuestos a ser verdugos de buen corazón. El sacerdote que le da al condenado la última oportunidadSigue leyendo «¿Ajusticiar?»

¿Cuál es el límite de la lealtad?

Hay gente que se casa, que elige por compañía a un ser humano aunque no entienda por qué se gasta toda la plata en libros, por qué no le cobra los préstamos a los hermanos, por qué le hace fuerza al Barcelona antes que a un equipo local o por qué come pizza con piña.Sigue leyendo «¿Cuál es el límite de la lealtad?»

¿Qué hay del otro lado?

Gente prisionera, viendo cada tarde la misma puesta de sol, armando su postal del mundo a través de una mínima fracción, uniforme y descolorida, como el mosaico del suelo de un viejo salón. Del otro lado del cerco un nítido paisaje se extiende hasta un horizonte que la vista no alcanza a cubrir: el ridículo imposible,Sigue leyendo «¿Qué hay del otro lado?»